Quizás si...

Siento los resortes de las camas rechinar. Se que me leen. He recibido algunos mensajes que agradezco. no daré nombres porque el abismo está a nuestros pies y cualquier empujón será caida. Sigo esperando por mi adorada Penélope... Por favor traten de localizarla, ella sabe con quien hablar para intentar sacarme de aquí. Daré señales para que puedan dar con ella, es de suma importancia hacerlo... vital y biológica importancia. No puedo dar muchos datos ahora, pero sepan que en el espejo de los motes y los apodos siempre se esconde algo de verdad. Yo soy un tipo preparado. Hace rato escuche un diálogo furtivo. No se si entre dos reclusos o dos guardias... aún sigo sin conocerle la cara a nadie. Sospecho que algo raro pasa en determinados momentos, ya que sin recordar haberme acostado suelo despertar de pesados sueños en diferentes posiciones, inlcuso en el gélido piso. Intuyo que en ocasiones, en muy seguidas y repetidas ocasiones, nos duermen con algun tipo de gas. Siempre después del sorpresivo sueño, aparece el maldito plato de sopa, el cual queda vacío hasta el próximo sueño en que es reemplazado o llenado nuevamente por el mismo asqueroso líquido sin que jamás hasta ahora haya podido yo ver a quien desempeña esa tarea. Quizá este sitio donde me encuentro no sea una prisión, quizá sea tan solo un experimento... Estoy seguro que el gobierno está metido... ¡¡¡Penélope habla con K.!!!